Por qué los hombres SIEMPRE ESTAMOS BIEN.

Mírate el vídeo.

Cuando te preguntan como estás, como hombre, ¿Dices la verdad?

Yo reconozco que no.

¿Por qué?

Seguramente forme parte de ese lado masculino agarrado a mi espina dorsal, ese que cazaba, que no podía cojear porque si mostraba debilidad lo apartaban de la manada o lo sustituían por otro líder.

También por ese ego masculino que tan malas pasadas nos hace pasar. No podemos fallarle. Como un padre de película de terror que te espera en casa con la correa si has perdido el partido más importante de la temporada fallando el penalti decisivo.

Nos hacemos cargo de ese dolor, lo empaquetamos y lo metemos, bien dobladito, en una mochila llena de decepciones, heridas y miedos.

Pero no lo enseñamos, no lo compartimos, no le damos esa carga a otro.

¿Cómo actúas tú ante un problema? ¿Lo cuentas a tu pareja o esperas a que ya haya pasado para decírselo?

Te cuento cómo enfrento yo esas situaciones.