Así COMBATO mi CRISIS DE LOS 40.
Y no es un descapotable.
Hola, Nico. Hola, Aurora.
Me he apuntado a un Hyrox.
¿Qué que es eso? Pues una prueba deportiva muy de moda, quizás cuando me estés leyendo lo que esta de moda sean las carreras de robots conducidos por IAs, pero ahora es lo que tenemos.
Si quieres saber de qué va te dejo un vídeo por aquí:
Os estaréis preguntando, Papá, ¿Ya estás con la crisis de los 40?
Pues no, primero, porque ya voy a cumplir 42, pero, en el fondo hay un poquito de razón.
Te cuento por qué me he decidido a hacerlo y cómo.
Como ya te expliqué en otra carta, siempre he sido muy inquieto y he probado multitud de deportes.
Pero, desde hace unos 5/6 años me noto bastante estancado, incluso en el aspecto profesional.
El segundo llevo ya un tiempo solucionándolo, pero el primero me estaba costando más, el entreno y hacer deporte se habían vuelto una rutina sin alma.
Papá os acostaba, iba corriendo a última hora de la tarde al gimnasio, hacía una rutina medio rápida para mantenerme y de vuelta a casa.
Esa es una de las palabras que más miedo me da y en la que me había instalado desde hacía años.
Mantenerse.
Nada se mantiene en la vida. O evolucionas o te quedas atrás. O renuevas o te oxidas. O vas para arriba o para abajo. No existe el quedarte en el mismo sitio para siempre, aunque lo parezca, pero cuando levantes la vista y mires hacia atrás, te darás cuenta de que esa deriva en la que te creías en el mismo sitio te ha llevado muy lejos de donde te gustaría estar.
Por lo tanto, no queda otra que coger el timón y decidir dirigirte a algún lado.
Ya voy teniendo una edad en la que voy escuchando cada vez más el “que me quede como estoy” como filosofía a mi alrededor y ese es el primer paso para morir en vida como ser humano.
Y es verdad que ha coincidido ese sentimiento de mantenerme en el mismo sitio mucho tiempo con el estar alrededor de los 40, así que he decidido que tenía que salir de ese estancamiento de un parte tan importante para mi como es el aspecto físico (que no estético).
¿Por qué Hyrox?
Es cierto que es bastante popular ahora mismo, lo que siempre ayuda a la hora de romper un patrón/hábito que llevo manteniendo demasiado tiempo, como es el entrenamiento de pesas.
Pero también ayuda que amigos de alrededor estén comenzando a competir también en esta disciplina para hacer comunidad y darnos ese apoyo y motivación extra.
De hecho, parte de este reto era salir cuanto antes de ese estado “en mantenimiento” así que, sabiendo que mi amigo
iba a participar el 8 de marzo en el Hyrox de Valencia, hace un par de días, el 10 de enero, decidí apuntarme a la misma competición pero con un ligero giro de tuerca.Me he apuntado en la categoría más exigente, HYROX PRO, que se realiza con los máximos pesos de la competición.
O sea, de no hacer cardio ni ejercicios funcionales desde hace 6 años me he propuesto hacer un HYROX PRO en 56 días.
¿Pero por qué Papá?
Tiene su explicación.
Hacía mucho que no me marcaba un reto exigente. El último reseñable fue en 2014 correr la maratón de Sevilla y necesitaba algo que me hiciera saltar del sillón de verdad, y esta disciplina y el plazo van a exigirme de verdad.
Quería sentirme incómodo con algo. El ser humano tiende a un estado basal de tranquilidad en el que sentirse cómodo y había llegado a tal punto que cualquier pequeño cambio lo sentía como una incomodidad. Ahora realmente voy a salir de ese estado porque, si no, no voy a llegar en la vida a la fecha del evento en condiciones.
Necesitaba sentir un proceso. Entrenar con pesas e hipertrofiar músculo se había convertido en un vacío absoluto. No mejoraba mi salud ni iba a conseguir resultados destacables porque para ello necesitaba una alimentación, tiempo de entreno y descanso que, con dos hijos pequeños no iba a conseguir.
Ilusión por mejorar marcas. Muy relacionado con lo anterior, al existir unas marcas que mejorar y tiempos que superar se me hace muy sencillo el tener un objetivo claro de si algo va bien o no, de incidir en pequeños detalles que me hagan ser mejor atleta. Volviendo al hándicap del entreno de pesas, entrenar para algo real.
Además, ya puedo volver a tirar de fotitos de Insta vacilando de entrenos, podéis seguirme por allí si queréis ver el día a día.
Por aquí alguna fotillos.
Y, sobre todo, disfrutar del proceso, intentar mejorar lo que hice ayer, sin mirar más hacia atrás.
Ser humilde sabiendo que nunca voy a repetir marcas que hacía 10 o 15 años atrás porque mi nuevo contexto es otro.
Intentar comer mejor hoy.
Intentar superar marcas de hoy.
Intentar ser mejor hoy.
Hacer todo lo mejor posible que este en mi mano y luego la vida decidirá.
Porque, en muchas ocasiones, lo mejor posible también es insuficiente.
Os quiero hijos.
PD Qué me gusta un gorrito.
Qué razón tienes con eso de que mantenerse no existe... Mi objetivo este año es integrar el entrenamiento de fuerza en mi vida, de momento es algo esporádico y quiero que sea un entrenamiento continuado. ¡Mucho ánimo con tu pedazo de reto!